El cumpleaños sorpresa de Maria Pilar

El domingo celebramos el cumpleaños 60 de María Pilar con la familia en la finca del Almorox. La familia lleva desde unos meses confabulando una fiesta sorpresa. Entre hilos e hilos de correos repletos de ideas, planes, tácticas y complotes, los instigadores consiguieron esconder la fiesta de María Pilar (para que el público entienda la magnitud del trabajo, a María Pilar no se le suele escapar nada. Ella mismo dice tiene un policia en la nariz). Habría olido algo si no fuera por las estrategias desorientadoras de todos los familiares. Marcos que preguntaba cuantos cumplía y la yaya que resforzó la noción de que no viniéramos (David y Jane) a Madrid hasta navidades. Ella también ha sido la heroína que consiguió que María Pilar no se fuera a Aranda en el día de dicha fiesta, que le entró ganas en el último minuto.
Las desastres esquivadas y las risas suprimidas, María Pilar llegó a la puerta del brazo con su marido conspirador incógnito y se encontró con un grito de "Sorpresa!", con una cascada de globitos y con una lluvia de confetti. Fue una tarde muy linda que nos hizo sol
en lo abierto y soplaba viento en la sombra. Comimos bocadillos, tomamos vinito y jugamos a una búsqueda de tesoros a traves de preguntas personales que llevaron a MP al guarda de su regalo, que era Teo claro. Después de recolocar una piedra de un metro de ancho, una presentación de fotos, una siesta en la hamaca y un paseo al río, nos despedimos de la finca anfitriona y llevamos a la niña del cumpleaños a casa, contenta. El reportaje aquí.